Vivienda Remodelada con aplicaciones Passivhaus en Valdivia se convierte en hotel que casi no gasta en calefacción

George Sommerhoff, Director de EEChile y Director del Instituto Passivhaus Chile desarrolló este proyecto.


Textos extraídos de reportaje de LUN del 20 de septiembre de 2019

Aficionado a la construcción convirtió su casa en un hotel que casi no gasta calefacción

“Estoy viejo ya. Jubilé en la universidad, tenía que ver qué hacer para vivir y este hotel es mi jubilación. Solo en contribuciones pago casi $200.000, entonces, es complicado”, cuenta George Sommerhoff (70 años), quien armó casi de forma autodidacta un hotel eficiente energéticamente en el segundo piso de su casa de poco más de 300 m2, en Valdivia.

George Sommerhoff

Es doctor en ingeniería industrial, especialista en temas de eficiencia energética, ingeniero acústico y en sonido y director del Instituto PassivHaus Chile, certificación alemana que promueve la eficiencia energética en la construcción. Con buena aislación térmica, vidrios eficientes, entre otros factores, reduce en torno al 90% el gasto en energía.

Conoció el sistema hace mas de diez años y se transformó en diseñador de esta certificación en Escocia. Fue académico del Instituto de Acústica de la Facultad de Ciencias de la Ingeniería de la Universidad Austral de Chile y se ha especializado en acústica arquitectónica. Ha estado detrás del sonido, por ejemplo, del Centro Cultural Gabriela Mistral, de las salas de clases e instalaciones de Inacap, hoteles, entre otros. Pero su hobby es la construcción. Como entretención empezó a diseñar casas: la suya, las de su familia (a su hija le hizo una casa que no necesita estufas y se mantiene a 20ºC) y también algunos amigos. Calcula que ha creado o intervenido unas 200 casas, pese a que profesionalmente no se ha dedicado a eso.

“En el área de la construcción hay maestros que saben más que los constructores (civiles). Son habilidades que se adquieren en mas de 40 años construyendo. Voy a aprender a otros países para ver cómo construyen y les enseño a los maestros”, cuenta.

En octubre abrirá oficialmente el hotel boutique Cutipay Chile, en el kilómetro 8 del camino a Niebla, con seis habitaciones a un precio de $70.000 la noche. Para ello, remodeló su casa de hormigón hecha hace más de 25 años. Le puso vidrios con tecnología Low E, que disminuye el calor que puede perder a través de las ventanas en la fría Valdivia.

Hotel boutique Cutipay

“No sacaba nada con gastar plata en vidrios más potentes o de triple capa si en otros lados se escapa el aire igual. Tengo que buscar los equilibrios. Pero el segundo piso, que lo hice de madera, sí pude hacerlo de forma más eficiente. Aunque tampoco completo porque el piso no tenía buena aislación. Le puse aislante de 14 centímetros, aunque debería haber tenido 28, pero igual funciona”, cuenta.

Le incorporó un sistema de ventilación mecánica por tubos -bajan a la tierra para que el aire frío tome temperatura e ingrese a la casa para temperarla-, poliestireno expandido en murallas y techos.

“Tengo calefacción sólo por si acaso, usamos radiadores porque la casa ya tenía y los mantuve. Esta casa debería usar 30m3 de leña, pero con las medidas que incorporé sólo ocupamos 8”, afirma.

Recorte LUN